La evolución de un oficio familiar

Nuestra historia

Desde 1932, nuestra familia ha hecho de la Xurrera un símbolo
de dedicación, sabor y tradición en Barcelona. Durante cinco generaciones, mujeres apasionadas hemos liderado este oficio familiar, manteniendo intactos los procesos y el cariño que dan
vida a cada churro.

Elaboramos nuestros churros con la mejor materia prima, preservando la receta original que ha acompañado desayunos
y momentos especiales de miles de clientes. La Familia Cruz no
solo te ofrece un bocado delicioso, sino también la oportunidad
de formar parte de nuestra historia.

Mi oficio familiar ha sido impulsado por mujeres fuertes, llegando a cinco generaciones con la Xurrera como símbolo de calidad y excelencia.

Tradición y excelencia en cada detalle

Sabor auténtico, en cinco generaciones